Danza Oriental, una danza que refuerza nuestro potencial femenino

Diosas, bellas, hermosas, femeninas, valiosas, suaves, intuitivas, maravillosas......

Interminable la definición de la mujer así como la lista de beneficios que nos aporta esta danza, al permitirnos recuperar esos valores que son tan nuestros.

Tímidas frente al espejo, comenzamos a mover nuestro cuerpo de manera suave, redonda, sutil, delicada, femenina, sensual y comienzan a aflorar emociones que nos proporcionan bienestar. Poco a poco sentimos la necesidad de adornar nuestro cuerpo con preciosos tops forrados de lentejuelas y monedas, cinturones que suenan al ritmo de nuestras caderas, faldas que vuelan mientras nos trasladamos en el espacio con nuestro baile y joyas que nos hacen parecen aún más bellas, más Diosas. Aceptamos nuestro baile y nuestro cuerpo y nos dejamos mecer en el placer que eso produce.

La bailarina de danza oriental transmite esos valores mientras baila y hace llegar al público su energía femenina que es tan importante en este mundo ya que es la que nutre, la que acoge, la que mece y la que cura.

La utilización de esta danza en los talleres en los que trabajamos con la conciencia corporal, la autoaceptación y la autoestima, aporta un resultado fantástico.

Dedicado a todas las valiosas mujeres

Sonia